Proteger a las niñeces y las juventudes es una urgencia y una responsabilidad internacional
La escalada actual del conflicto entre Israel y Palestina representa un tema de creciente preocupación por el cual este Grupo de Trabajo desea expresar su posición de repudio a toda manifestación de violencia, intolerancia y, en particular, hacia las prácticas genocidas que involucran el asesinato, la tortura y el desplazamiento forzado de la población civil.
La continua política de ocupación y anexión por parte del Estado de Israel del territorio palestino, la construcción y expansión de asentamientos y el impulso de prácticas colonizadoras, incluido el desplazamiento forzoso de civiles y el bloqueo de la Franja de Gaza, constituye una realidad cotidiana desde hace más de 13 años. Los recientes acontecimientos han tenido un terrible impacto para la población infantil y juvenil, con un creciente número de niños y niñas muertos y heridos resultantes de los constantes bombardeos contra la población civil. Según reportes de la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios, desde el 7 de octubre han muerto más de 3.400 niños y niñas palestinos, lo que representa más de la mitad del total de las víctimas mortales. Están, además, afectados por los desplazamientos forzosos, la destrucción de sus hogares, la imposibilidad de funcionamiento de las redes eléctricas, plantas potabilizadoras de agua, hospitales, unidades de cuidados neonatales, que agravan la situación de falta de alimentos, agua potable, asistencia médica y refugios seguros.
El brutal ataque cometido por Hamás, que causó centenas de muertes de civiles, muchas de ellas de niñas, niños y jóvenes y que repudiamos, no puede pensarse por fuera de una historia que, en las últimas décadas, estuvo signada por crecientes agresiones por parte del Estado de Israel y su gobierno contra la población palestina.
Por ejemplo, UNICEF señala que antes incluso de los repudiables ataques del pasado 7 de octubre contra población israelí, las niñeces de Cisjordania se enfrentaban al mayor nivel de violencia ligada al conflicto en las dos últimas décadas, con 47 niños y niñas muertos entre enero y septiembre de este año (41 palestinas y 6 israelíes).
Los ataques aéreos y las operaciones militares del Estado de Israel en los territorios palestinos sobre viviendas, hospitales y escuelas, el bloqueo de alimentos y suministros médicos a Gaza, violan el derecho humanitario internacional y constituyen crímenes de guerra que tienen un enorme costo humano para la población infantil y juvenil. Además, con estas masacres el gobierno israelí desconoce los numerosos llamados y las resoluciones de diversos organismos del sistema de Naciones Unidas y genera una catástrofe humanitaria que debemos frenar de manera urgente. La eliminación de las nuevas generaciones constituye un genocidio hacia el pueblo palestino.
Ante esta situación, el Grupo de Trabajo CLACSO Infancias y Juventudes se une a las voces que en diferentes partes del mundo hacen un llamado a un cese inmediato del fuego, a detener los desplazamientos forzados, a garantizar el acceso seguro a la ayuda humanitaria en la Franja de Gaza con prioridad para niños y niñas, a proteger las instalaciones civiles (en especial, hospitales, escuelas y refugios), la liberación de los/as niños/as y jóvenes rehenes de Hamas, así como al compromiso intelectual para desentrañar las causas profundas de estos conflictos y guerras y a la búsqueda de una solución amplia, justa y duradera, que garantice el derecho de las niñeces y las juventudes de ambas naciones a convivir en paz.
7 de noviembre de 2023
Grupos de Trabajo CLACSO
Infancias y juventudes
Este texto expresa la posición del Grupo de Trabajo Infancia y juventudes y no necesariamente la de los centros e instituciones que componen la red internacional de CLACSO, su Comité Directivo o su Secretaría Ejecutiva.
