Pronunciamiento de rechazo a la violencia y llamado al diálogo en Ecuador
El Grupo de Trabajo CLACSO Infancias y juventudes observa con enorme preocupación el incremento de la violencia estatal desatada en contra de los sectores sociales movilizados en el contexto del paro nacional e indefinido convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador, CONAIE. Las declaraciones emitidas el pasado viernes 24 de junio por parte del Presidente Guillermo Lasso, anunciando la intensificación del “uso progresivo de la fuerza” contra la población que de manera legítima reclama y exige sus derechos y el cumplimiento de los ofrecimientos gubernamentales, ha profundizado el escepticismo, perplejidad e indignación de quienes aspiramos al establecimiento de condiciones generales de vida enmarcadas en la dignidad de la persona y colectividades como fundamento de una convivencia pacífica y democrática.
Cabe recordar que, a poco de iniciado el paro nacional en curso, la concurrencia de múltiples organizaciones sociales que plegaron al llamado de la CONAIE, evidenció el vigor del descontento popular contra un gobierno que, de modo incontrastable, se ha mostrado incapaz de atender el conjunto de demandas planteadas desde distintos sectores sociales y que, incapaz también de procesar políticamente el conflicto social, ha dedicado su gestión y recursos gubernativos hacia la deslegitimación de la protesta social desde su propia vocería, desde sus representantes y asesores ministeriales, así como a través de los medios masivos de comunicación que no han tenido reparo alguno en amplificar afirmaciones dirigidas a la descalificación y estigmatización de la movilización popular, de sus líderes y dirigentes. Tales posturas y ejecutorias han confirmado, lamentablemente, la escasa voluntad efectiva de su desgastado llamado al diálogo, más aún luego de transcurrido un año de sistemático incumplimiento gubernamental de ofrecimientos en, al menos, dos momentos de diálogos previos con la CONAIE.
El saldo del escalamiento de la violencia al concluir el décimo tercer día del paro nacional, deja 5 personas fallecidas, 8 desaparecidas, 145 heridos y 127 detenciones. En este crispado escenario, expresamos nuestra consternación por las víctimas y sus familiares y dejamos sentado nuestro repudio hacia toda forma de represión ejercida contra la población en general pero, particularmente, hacia niños, niñas, jóvenes y mujeres. A todo ello, los efectos de la deliberada deslegitimación de la protesta social ejercida desde la esfera gubernamental, asociándola ya no solo al “castrochavismo” y al vandalismo como sucedió en 2019 sino al narcotráfico, que supuestamente estarían financiando la revuelta popular, se muestran con nitidez en ciertos sectores de la población. Desde allí, y estimulados por el incendiario relato oficial, grupos autodenominados “gente de bien” han difundido expresiones cargadas de violencia racista, discriminatoria y neofascista, que lejos de contribuir con posibles vías de procesamiento del conflicto, lo atizan.
En el seguimiento de los hechos, hemos constatado el espíritu cívico y la voluntad de paz de las instituciones de Educación Superior que han abierto sus puertas a la población indígena concentrada en Quito. La Universidad Central del Ecuador y, de modo particular, la Universidad Politécnica Salesiana, anfitriona en varias ocasiones de eventos académicos realizados por nuestro Grupo de Trabajo, han ratificado con estas acciones su histórico compromiso con los sectores más desprotegidos por el Estado y su legitimidad social como espacios de ayuda humanitaria propicios para el diálogo y la mediación democrática del conflicto.
Nuestra profunda preocupación por el curso y desenlace del diálogo que hoy, al concluir el 25 de junio de 2022, vuelve a plantearse entre el Gobierno y la CONAIE, viene también cargada de expectativas que reafirmen el sentido de una convivencia razonablemente democrática que solo será posible en el marco de una voluntad y acciones gubernamentales orientadas hacia la implementación de políticas y medidas que garanticen condiciones de vida dignas a la mayoría de la población, actualmente sumida en una espiral de precariedades desde las cuales se entiende el porqué de su indignación y movilización. En tal sentido, desde nuestra condición ciudadana, como académicos comprometidos con un horizonte de justicia social, hacemos un respetuoso y enfático llamado a los actores sociales e institucionales que representan las voces del conflicto, a deponer la violencia y asumir los principios de un diálogo genuino que sitúe como punto de referencia central la dignidad y el bienestar de toda la población ecuatoriana y no solo de algunos sectores históricamente privilegiados.
27 de junio de 2022
Grupo de Trabajo CLACSO
Infancias y Juventudes
Este pronunciamiento expresa la posición del Grupo de Trabajo CLACSO Infancias y Juventudes y no necesariamente la de los centros e instituciones que componen la red internacional de CLACSO, su Comité Directivo o su Secretaría Ejecutiva.
