Las mujeres originarias y guardianas de la tierra siguen siendo criminalizadas por la defensa de sus territorios en la Patagonia Argentina

El Martes 26 de Octubre inició el juicio penal contra Gloria Colihueque y su primo Gregorio Cayulef, que pertenecen al Lof Colihueque-Catriman. Tanto Gloria y su madre Isabel Catriman (78 años de edad) vienen siendo hostigadas y recibiendo amenazas por luchar en defensa de sus cuerpos-territorio-tierra y los bosques nativos en la Patagonia. El tribunal judicial provincial estará representado por la jueza Alicia Fernanda Revori y quien lleva la acusación es la fiscalía Maria Bottini. La fiscalía es conocida en la zona por su participación en diversos conflictos territoriales con una perspectiva anti-derechos de los pueblos Mapuches. A Gloria le acusan de amenazar con un arma de fuego a los empresarios Alejandro Samame y Nahuel Serra, quienes se adjudican la propiedad del territorio en el que habita hace más de dos décadas la comunidad indígena  «Lof Catriman Colihueque». 

Se trata de 844 hectáreas hoy «fiscales» (propiedad del Estado provincial) linderas al Parque Nacional Los Alerces y cercanas a las lagunas Larga y Martillo. Nahuel Serra es socio principal de una empresa distribuidora y mayorista (SERRA SRL) y Alejandro Samame es miembro directivo (vicepresidente) de la Sociedad Rural de Esquel. Su familia tiene estrechos vínculos con la justicia de Chubut: su padre, Eduardo Samame fue procurador general de la ciudad de Esquel.

El 20 de Abril los empresarios ingresaron al campo situado en la zona de Laguna Larga, lindera al Parque Nacional Los Alerces, en la provincia de Chubut. Tras una serie de denuncias cruzadas y a pesar de la incapacidad por parte de los mismas de probar heridas o presencias de armas;  Samame y Sierra,  habilitaron para la explotación agrícola ganadera, forestal y minera en todas sus etapas por un lapso de 99 años; recibieron el apoyo del sistema judicial para seguir el curso legal de la causa penal.

Desde el Movimiento de Mujeres Indígenas por el Buen Vivir a la Agencia Presentes, las mujeres de la organización expresaron: «Estos hombres que se sienten expuestos y debilitados por la fuerza categórica de estas mujeres mapuche, decididas a defender la vida y el territorio, se sienten amenazados en sus privilegios y en su accionar terricida. No actúan solos, todo el aparato judicial está de su parte, es por ello que tememos que una gran injusticia sea la respuesta del Estado ante tanta valentía y dignidad de nuestras hermanas».

Desde el 1 de noviembre hay una ocupación pacífica del IAC (INSTITUTO AUTARTICO DE COLONIZACIÓN Y FOMENTO RURAL) y de BOSQUES en la ciudad de Esquel-Chubut, en repudio a las políticas de racismo y despojo de la población mapuche tehuelche en los territorios.

La historia de Gloria, Isabel y su familia representa las distintas formas de violencias que atraviesan la vida de las mujeres que luchan por la defensa de sus territorios y en contra los proyectos extractivistas moderno/colonizador en Argentina. Esos hechos subscriben la lógica del “pacto de machos” (empresarios y la justicia patriarcal vigente) que con desmedido poderío avanzan con sus armas y sucesivas amenazas a estas mujeres que históricamente ven  sus vidas afectadas por el (mal) desarrollo. El Estado Argentino debe reconocer el territorio de los pueblos como un derecho originario a fin de impedir los desalojos y desplazamientos de mujeres y sus comunidades enteras. Es momento de estar activxs contra la vulnerabilidad de derechos que se impone cotidianamente contra las mujeres originarias racializados en nuestros territorios.

¡No más terricidio y violencias contras las mujeres originarias!

4 de noviembre 2021
Grupo de Trabajo CLACSO
Epistemologías del sur

Firmantes:

Francia Márquez
Karina Bidaseca
Lucia Nuñez Lodwick
Agustina Molina
Michelley Aragão

Adhesiones: https://forms.gle/N17HJxnAm2AWwDdP6

Esta declaración expresa la posición del Grupo de Trabajo Epistemologías del sur y no necesariamente la de los centros e instituciones que componen la red internacional de CLACSO, su Comité Directivo o su Secretaría Ejecutiva.